ASAJA Castilla-La Mancha pide medidas urgentes ante la expansión de la lengua azul en la región
La Asociación Agraria-Jóvenes Agricultores (ASAJA) Castilla-La Mancha ha solicitado una reunión urgente con la directora general de Ordenación Agropecuaria para abordar la rápida expansión de distintos serotipos del virus de la lengua azul, que está afectando especialmente a ganaderías de Ciudad Real y Toledo. La organización reclama vacunas inmediatas y una campaña informativa para frenar la propagación.
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La Asociación Agraria-Jóvenes Agricultores (ASAJA) Castilla-La Mancha ha advertido sobre la “preocupante expansión” de la lengua azul en varias provincias de la región, con especial incidencia en Ciudad Real y Toledo en las últimas semanas.
En un comunicado, la organización ha solicitado una reunión urgente a la directora general de Ordenación Agropecuaria, Lydia Benítez, para abordar la situación. Según ASAJA, la ausencia de restricciones a los movimientos ganaderos, unida al previsible aumento de la actividad del vector transmisor en los próximos meses, podría provocar “graves daños en la cabaña ganadera regional si no se toman medidas inmediatas”.
La organización agraria reclama la distribución urgente de vacunas, priorizando las zonas afectadas, así como la puesta en marcha de una campaña informativa dirigida a los ganaderos. El objetivo es prevenir y contener el brote, subrayando la importancia de comunicar “cualquier sospecha de aparición de síntomas con la lengua azul”.
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ASAJA recuerda que este brote supone un riesgo añadido para un sector ya castigado por la falta de pastos debido a la sequía y por el incremento de los costes de producción. Por ello, solicita ayudas económicas urgentes para las explotaciones afectadas.
La entidad considera “imprescindible” una actuación rápida y coordinada entre las administraciones competentes —Ministerio y consejería de Agricultura— y el conjunto del sector para “proteger la sanidad animal y garantizar la viabilidad de las explotaciones ganaderas en la región”.
La lengua azul es una enfermedad vírica no contagiosa que afecta a rumiantes domésticos y salvajes. Se transmite por la picadura de ciertos mosquitos del grupo Culicoides y presenta síntomas más graves en los ovinos, donde la mortalidad media oscila entre el 2 % y el 30 %, pero puede alcanzar el 70 %. En bovinos, la tasa de infección suele ser incluso más alta.
Este virus no se transmite por contacto directo ni por el consumo de carne o leche, por lo que no supone un riesgo para la salud pública.
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ASAJA Castilla-La Mancha insiste en que la rápida actuación es clave para contener la propagación de la lengua azul y proteger al sector ganadero regional.