Grupo Griñó responde a la moción sobre el vertedero de Almonacid del Marquesado
Grupo Griñó ha respondido a la moción presentada por el Grupo Popular en la Diputación de Cuenca sobre la gestión de residuos en el vertedero de Almonacid del Marquesado. La empresa niega rotundamente las acusaciones sobre supuestas irregularidades y recalca que su actividad cumple con la legislación vigente. Además, defiende que no existe riesgo alguno para la salud pública ni para el medio ambiente, señalando que algunas informaciones publicadas en medios de comunicación no se corresponden con la realidad.
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La moción presentada en la por el Grupo Popular en la Diputación de Cuenca pone en cuestión la gestión del vertedero de Almonacid del Marquesado y su impacto ambiental. En respuesta, Grupo Griñó ha emitido un comunicado en el que reclama el respeto a la presunción de inocencia y lamenta el uso de información falsa para alimentar el debate político.
La empresa desmiente de manera categórica cualquier tipo de irregularidad en su actividad y garantiza que todas sus operaciones se realizan bajo el estricto cumplimiento de la normativa nacional e internacional. Además, recalca que ninguna de sus acciones ha supuesto un riesgo para la salud pública ni para el medio ambiente.
Datos sobre la gestión de residuos en Castilla-La Mancha
Según la empresa, en el periodo 2023-2024, en Castilla-La Mancha se han generado 40 millones de toneladas de residuos, de los cuales el parque ambiental de RDM (Reciclados del Marquesado, SL) tiene capacidad para gestionar 600.000 toneladas. De esta cantidad, solo 8.038 toneladas corresponden a residuos transfronterizos, lo que representa un porcentaje mínimo del total.
Además, Grupo Griñó subraya que no se han recibido residuos tóxicos ni peligrosos, lo que puede ser acreditado mediante los procedimientos de admisión, los informes de inspección de las autoridades competentes y los análisis de control ambiental realizados en la instalación y en las aguas subterráneas.
Cumplimiento de la normativa ambiental
En relación con el cumplimiento de la Autorización Ambiental Integrada (AAI), Grupo Griñó afirma que la empresa inició su actividad en septiembre de 2019, cumpliendo con los requisitos establecidos en la AAI. Posteriormente, invirtió en mejorar sus instalaciones, lo que permitió que la planta de tratamiento de residuos comenzara su actividad en febrero de 2021 con tecnología de última generación.
Según se señala en el comunicado, todas las inspecciones realizadas desde el inicio de su actividad han demostrado el cumplimiento estricto de la normativa ambiental vigente. Además, la compañía sostiene que el incendio ocurrido en 2021 no afectó la seguridad de la celda del depósito, ya que esta fue reconstruida y certificada por una Entidad de Control Autorizada, bajo la supervisión de la administración competente. También destaca que el sistema de control ambiental garantiza que las aguas subterráneas no han sufrido contaminación y que los análisis periódicos realizados han confirmado el buen estado del agua y del entorno.
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Investigación sobre el traslado de residuos desde Italia
En relación con la investigación de la Guardia Civil sobre el traslado transfronterizo de residuos desde Italia, Grupo Griñó niega las acusaciones y subraya que esta actividad es completamente legal y representa menos del 2,5% de su negocio.
La compañía señala que algunas informaciones publicadas en los medios de comunicación no se ajustan a la realidad, y que ciertas interpretaciones de documentos policiales han sido utilizadas sin fundamento. Además, anuncia que tomará medidas legales contra la difusión de informaciones falsas o difamatorias que afecten su reputación.
Compromiso con la legalidad y el medio ambiente
Con más de 1.100 empleos directos y 500 indirectos, Grupo Griñó enfatiza su compromiso con la gestión responsable de residuos. Desde su creación, el grupo ha apostado por la innovación y el cumplimiento estricto de la normativa ambiental para garantizar un modelo de gestión sostenible. En este sentido, reitera su disposición a colaborar con las autoridades para aclarar cualquier cuestión relacionada con la investigación.
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Grupo Griñó niega cualquier irregularidad en su gestión del vertedero de Almonacid del Marquesado y defiende su cumplimiento con la normativa vigente. Además, enfatiza que su actividad no supone un riesgo para la salud pública ni para el medio ambiente y que ciertas informaciones difundidas en los medios no se ajustan a la realidad. Finalmente, la empresa estudia emprender acciones legales para defender su reputación.
Imágenes tomada del sitio web del Grupo Griñó.